miércoles, 15 de enero de 2014

Vine por ti, perra



Por Mauricio Vargas Herrera y Juan Camilo Suárez Galindo.

(Basado en el tema «Masacre en el puticlub»)

¿Es bella no? Es hermosísima. Creo que ya te cansaste de escucharlo, ¿no, amigo? Por eso sigo viniendo. Por eso es que me ves aquí todos los viernes. Desde aquí todo se ve perfectamente. Cuando sale, envuelta en ese ondeante traje blanco. Te lo digo, nunca he visto una chica así en toda mi vida, y créeme, he visto un montón de chicas. Me he acostado con buena parte de ese montón. Pero ninguna se compara a ella. Nadie tiene lo suficiente para pararse en ese escenario, amigo. Sírveme otra. Eso, gracias. Pura ambrosía para el hígado. Aaahhh, otra. Necesito tomarme mis pastillas. Llénalo. Gracias. Aaahhh, entra derecho. ¿Qué hora tienes? ¡Vaya, se pasa el tiempo volando! Ya casi sale. Cuestión de minutos. Me encanta el preámbulo, cuando apagan las luces y ella va saliendo. Me fascina. Aunque ella no debería estar clavada en este antro lleno de alimañas. No es por ti, amigo. No tienes la culpa, al fin y al cabo. Pero no puedes negar que esto es un maldito hueco pestilente. Y mira a todos esos hijos de perra que están allá. Escorias. Aguardando a que ella les roce la mejilla con su mano. Como si tuvieran alguna oportunidad. No, ella no está para eso. Merece más. ¿Sabes? He venido todos estos días analizando la cuestión. Quiero llevármela. ¿Has observado cómo me mira? Le he estado enviando a su casa algunos detallitos. Sabe que me gusta lo que hace, aunque me gustaría más que lo hiciera en mi habitación jejejejeje. Por eso no tengo necesidad de irme a parar allá adelante. Ya me conoce. Quiero sacarla de aquí. Es una perra, lo sé. Una maldita zorra, pero es una zorra inmaculada a la que quiero hacérselo todos los días, mañana, tarde y noche jejejeje. Es una tontería enamorarse de una chica de esas. Pero vale la pena intentarlo, ¿no? Recuerdo una película, de unos soldados que encontraban un dinero ilegal enterrado en el campo. ¿La viste? Sí, que uno de ellos se enamoraba de la puta del club ese, le ofreció todo, quería irse a vivir con ella, se la durmió esa noche y al siguiente día lo dejó en la ruina, se escapó con los billetes jajajajaja. ¡Vaya infeliz de mierda ese! A mí no me pasará eso. Quiero sacarla de aquí y lo haré cueste lo que cueste. Qué dices, chico, ¿te parece una buena idea? Sí, ya sé que es hija del dueño de toda esta cueva asquerosa. Pero hoy tengo a mis aliadas aquí conmigo. Ya armé un plan. ¿Trajiste pantalones de repuesto? Porque en breve te vas a cagar, literalmente. Shhh, shhh, mira, ahí sale. Oh, sí, bella como siempre. Mira qué porte, qué sensualidad. Quiero ser ese traje blanco. Debe de oler delicioso. Nunca me canso de verla, ¿tú sí? No lo creo, amigo. Detrás de esa barra tienes lugar privilegiado. Oh, mira, mira como nos observa. Me está buscando a mí, jejejeje, lo sabe, soy su salvador. Vaya perra esa. Mi perra. La amo, maldita sea. Oye la música, es esclava de sus movimientos. Que le suban, ¡que le suban a ese rock! Sí, oh sí, dame otro, quiero mi pastilla. Llénalo para pasarla. Aaahhh, delicioso. Mira, mira ese pobre sujeto. Se derrite al verla allí agachada frente a su rostro. Vaya idiota. Y pensar que ahora tendrá que llegar a casa a ver a su esposa. Ve como me mira desde allá. ¡Muack! ¿Lo sentiste, preciosa? ¡Mucak! ¡Muack! Hoy es tu día de jubilación. Mañana bailarás sobre mi cama. Solo tu último movimiento. Eso. Lléname otro, chico, para la pastilla, ya sabes. Eso sí. Ahhhh. Toma, quédate con el cambio. No, no abras los ojos así, es solo una retribución por refrescarme el pescuezo y oír mis tonterías. Aprovéchalo, chico, vete de este moridero también. Ahí te doy suficiente. Ahora saca tu culo de aquí, a menos que quieras ensuciar tus pantalones. Y ahora, que comience la verdadera función. Nena, voy por ti. 

¡BANG!

¡BANG!

¡BANG!


3 comentarios:

  1. Brillante, Mauricio, Juan Camilo.
    Me parece estar ahí, en medio del cabaret, al lado del protagonista, escuchándolo y viendo todo lo mismo que él ve (mérito absoluto de ustedes como autores).
    El desenlace es tremendo, inesperado: me encantó.
    Los felicito, señores, han estado ¡diez puntos!
    Saludos.

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  2. jaja buenísimo mauricio!! excelente monólogo. tal cual...
    salutes!!!

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